sábado, 22 de noviembre de 2014

Devastado

Anoche, 21 de noviembre del 2014, nos invitaron a una cena para una celebración previa a Thanksgiving por los estudiantes internacionales que se van al final de este trimestre. Fue organizada, por Rosa, una generosa muchacha de Kenya graduada de NCC. La comida estuvo exquisita y me estaba divirtiendo.

Sin embargo, todo cambió cuando recibí un mensaje de Jocelyn, mi mejor amiga en El Salvador. Juan nos dejó. Lo primero que se me vino a la mente fue la negación "No, no, no, no, no, no. No puede ser cierto". Le avise a mi papá... Mi amigo de El Salvador aquí me prestó su celular y le marqué a Jocelyn. Cuando escuche su voz lo único que pude hacer fue llorar, llorar nada más. Salí de la casa y empecé a caminar sin rumbo, en el frio, llorando. No había nada más que hacer.

Cuando regrese a mi cuarto, me conecte en Skype para hablar con Jocelyn. Casi no hablamos, lloramos, eso fue todo. Mi ojos parecen no tener más lagrimas. Mi corazón esta hecho pedazos. Juan, no te volveré a ver. Mi amigo, mi hermano, mi compañero... ¿Porqué?

Aún así, sé que estás mejor. Ya no estás sufriendo, pero dejas un vacío en mi que nada ni nadie puede llenar. Quizás es egoísta, pero desearía que siguieras aquí. Desearía haberte visto una vez más, al menos haber hablado con vos por Skype.

No hay nada más que decir, mi vida en los EEUU está en sombras ahora... Cuanto no quisiera salir corriendo, volando de este lugar para estar en tu funeral al menos.

Como dice Charlie "“Las cosas cambian. Y los amigos se van. Y la vida no se detiene para nadie".


Gracias por leer.

May the odds be ever in your favor!
  

No hay comentarios.:

Publicar un comentario